Manual básico para cerveceros novatos (incluye Ruta de Cerveza Artesanal en Praga)
Si te gusta la cerveza pero no eres ningún experto, te invitamos a conocer algunos rasgos de la cerveza checa antes de que viajes a este país. Además, si tu itinerario contempla Praga, podrás disfrutar de un tour guiado “en español” por las mejores microcervecerías de la capital. ¿Estás dispuesto a disfrutar de esta bebida amada por los checos y por medio mundo?
Por: Pepa García
Publicado: Agosto 23, 2021
Sobre la cerveza checa hemos escrito bastante en Destino Chequia, del producto, las costumbres, ciudades directamente relacionadas como Pilsen... y no nos repetiremos. En esta ocasión, únicamente pretendemos que en cinco minutos te pongas al día respecto a tendencias cerveceras en la República Checa. Para responder a algunas cuestiones básicas que harán que llegues a Praga con más seguridad en este tema, entrevistamos a Jakub Neuzil durante la celebración del Día de la Industria Cervecera Checa. Experto en este centenario elixir, Neuzil trabaja para Czech Brewmasters y es cofundador de Prague Craft Beer Tours, una empresa que organiza rutas guiadas por microcervecerías, principalmente de Praga.
Martin y Jakub, de Prague Craft Beer Tours.
¿Cuál es la cerveza que más se consume en Praga?
La más demandada es la Pils (o Pilsen), pero no me refiero exclusivamente a Pilsner Urquell. Esta es la marca más conocida de la República Checa, además de que son los pioneros en este tipo de cerveza; sin embargo, eso no significa que sean los únicos que producen buena cerveza Pils. De hecho, personalmente me parecen mejores las artesanales que hacen en las microcervecerías...
El 70% de la cerveza producida en el mundo es tipo Pils, incluso la elaboran empresas grandes como Heineken y Carlsberg, pero la mejor se hace en la República Checa. ¿Sabes que los checos somos grandes consumidores de cerveza? El año pasado la media anual per cápita estuvo en 146 litros (unas 292 jarras de medio litro). Y esa cantidad tiene una sencillaexplicación, ya que este tipo de cerveza es muy fácil de beber porque en Chequia se dan las mejores condiciones para su elaboración.
¿Dónde radica el secreto de su calidad?
No es un secreto sino varios. El primero es el agua, su ingrediente principal, y en Chequia la tenemos de alta calidad y muy ligera, incluso la del grifo es buena en cualquier lugar. El 96% de la Pilsen es agua, y el 4% alcohol. También se debe usar únicamente cebada (aunque en las industrias más grandes emplean a veces trigo para que salga más espuma). En la parte oriental de Chequia disponemos de malta de cebada de gran calidad, y el lúpulo checo también goza de gran prestigio, de hecho ocupamos la tercera posición mundial entre los cultivadores de lúpulo, después de EEUU y Alemania. Este lúpulo es muy equilibrado en cuanto al amargor, al no ser tan intenso como en la IPA hace que se beba mejor.
En otros países, como España, no es habitual poner mucho lúpulo. Este es el ingrediente más caro y se pone poco, de ahí que la Pilsen española sea menos amarga. Al tener lúpulo local en Chequia es barato, y la cerveza gana en sabor y cuerpo.
¿Cómo se debe servir la cerveza checa?
La temperatura óptima para servir una buena Pils está entre 4 y 6 ºC. Este tipo de cerveza requiere de una temperatura inferior pero sin llegar a usar una jarra helada, como hacen en algunos lugares... Si usas un vaso muy frío, el consumidor no capta los “errores” de una cerveza. De ahí que se emplee esa táctica para presentar la cerveza de peor calidad. El tamaño también es importante, debe ser de medio litro, y con dos o tres dedos de espuma. Si te sirven mitad y mitad, lo están haciendo mal...
¿Hay vida más allá de la Pils?
Aunque la Pilsen es la más consumida (y el 87% del total producido) no es la única. De hecho, es lo que queremos mostrar en los recorridos de Prague Craft Beer Tours. Desde el año 2020 tenemos unos 54 tipos de cervezas oficialmente registrados en el mundo.
En términos generales, se podría decir que en la República Checa hay dos tipos de consumidores: los que pertenecen a aquella generación que sólo considera cerveza a la tipo Pils, y los amantes de la cerveza artesanal (entre un 10 y un 13% de personas). Este último grupo está creciendo cada vez más como demuestran las 450 microcervecerías que existen (cada semana abre una nueva), una cifra muy elevada si la comparamos con las 80 que tiene Austria, un país de un tamaño similar.
Mientras los tradicionales se decantarían por una Pilsner Urquell los segundos buscarían una IPA. Otros tipos de cerveza, como la de trigo, también está tratando de introducirse en el mercado.
¿Qué cerveza nos aconsejas pedir si vamos a Praga?
Si quieres una cerveza tradicional, una Pilsner Urquell. En algunos lugares la ofrecen de tanque sin pasteurizar, sin filtrar, y se bebe muy bien. Se pueden tomar fácilmente 7 u 8 jarras de este tipo sin emborracharse. En lo relativo a las artesanales, recomendaría la cervecería Muflón que sólo está en Praga. Y también la cerveza artesanal de Pilsner Urquell. Ambos tipos se pueden conocer en nuestros tours (no se permite visitar la fábrica de modo particular).
Prague Craft Beer Tours, 'Ruta de la cerveza artesana' en Praga
Tras esta pequeña relación de preguntas y respuestas, quizás tengas interés por conocer en qué consisten las rutas de Prague Craft Beer Tours. Como bien sabes, las visitas guiadas por el personal adecuado pueden cambiarnos la percepción de un destino, y en el caso de esta empresa también la de un producto como la cerveza. En este caso, es interesante realizar el itinerario con ellos por la fiablidad de los guías, ambos introducidos en la industria cervecera, maestros y sommeliers cerveceros y conocedores de todo lo que se cuece en Praga.
Jakub Neuzil trabaja en Czech Brewmasters (proveedora de tecnología a cervecerías) y su socio Martín Havlin, lo hace en Pilsner Urquell. Sus visitas son adecuadas tanto para los apasionados del mundo de la cerveza como para quienes sienten curiosidad, y, sobre todo, para aquellos que quieran ir más allá y deseen conocer algo más que lo meramente industrial.
Otro punto a su favor es que disponen de acuerdos con determinadas factorías de cerveza que no abren al público. Incluso es posible conocer cervezas elaboradas en monasterios como el de Brevnov –que lleva elaborándola desde el año 993–, hablar con sus maestros cerveceros, y degustarla in situ.
Por último, disponen de varios itinerarios con distinta duración (entre 2 y 6 horas) y temática (Regular, Premium y de Monasterio), además de la posibilidad de realizar talleres. Puedes ampliar la información y reservar el que más te convenza en la web de Prague Craft Beer Tours.
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